¿EL TABACO CALMA LA ANSIEDAD?
Generalmente, se cree que muchas adicciones como el tabaco o el alcohol hacen de tranquilazante a la hora de lidiar con el estrés o la ansiedad, y lo cierto es que ocurre todo lo contrario.
Pongamos un ejemplo.
University College London, en 2015 llevo a cabo un estudio de 6500 participantes que demostraba la falsedad de este mito popular: fumar aumentaba un 70% el riesgo de sufrir depresión y ansiedad. De todos los sujetos, el 18,3% de los fumadores presentaba síntomas claros de depresión y ansiedad, frente al 10% de los no fumadores y el 11,3% de los ex-fumadores.
Entonces, ¿por qué sientes alivio cuando consumes una de estas sustancias?
Porque se trata de un alivio a corto plazo.
Si bien en el momento sientes menos ansiedad fumando, a futuro esta sensación se verá sustituida por el estrés de la abstinencia de nicotina, creando una excesiva dependencia al tabaco. Y lo mismo ocurre con otro tipo de adicciones.
¿Esto significa que la relación entre la ansiedad y el consumo de este tipo de este tipo de sustancias es bidireccional?
Exactamente. Algunos trastornos de ansiedad pueden causar mayor consumo de drogas a la vez que el uso habitual de una sustancia lleva a sufrir problemas de ansiedad como malestar, irritabilidad, taquicardia, etc.
Por tanto, los consumidores habituales de este tipo de adicciones presentan niveles de ansiedad muy superiores a los no consumidores, llegando incluso a padecer estos síntomas en periodos muy posteriores al abandonado del consumo.
¿Cómo enfrentarse a este tipo de acciones? En próximas secciones de nuestro blog, te contaremos algunos consejos para combatir esta dependencia. Una vez más, gracias por visitarnos y, ¡nos vemos pronto por aquí! |